A medida que la competencia es cada vez mayor y los productos ofertados en el mercado son cada vez más variados, los consumidores se vuelven más exigentes. Las empresas no solo buscan calidad y buenos precios, sino también brindar un buen servicio al cliente. Esta estrategia será nuestra propuesta para generar valor agregado a nuestros clientes y fortalecer nuestra relación comercial.

Para desarrollar el valor en tu empresa, sugerimos lo siguiente:  

1. Alinear los objetivos de la empresa, enfocada en el servicio al cliente (vendedores, atención al cliente y áreas relacionadas). 
2. Invertir en capacitaciones constantes. A nuestros clientes le gusta saber que la empresa está enterada de lo que pasa en la industria y cuáles son las tendencias. 
3. Comunicación asertiva con nuestros clientes y siempre enfocados en como nuestros productos y servicios les abrirá paso en el mercado. 

Dicen que para vender debemos de conocer muy bien nuestros productos; lo mismo aplica para tus clientes. El análisis FODA es la mejor herramienta para esto. Te recomendamos hacer un análisis FODA por cliente, el resultado te ayudará a comprender la situación de cada uno y podrás alinear tus estrategias para generar más valor. 

Cuando un cliente encuentra el producto que buscaba, y además recibe un buen servicio al cliente (valor agregado), queda satisfecho y esa satisfacción hace que regrese y vuelva a comprarnos, y que muy probablemente nos recomiende con otros consumidores.

El valor es la diferencia entre los beneficios y los costos percibidos por el cliente, los costos incluyen no sólo lo que le cuesta monetariamente el producto o servicio, sino el costo del tiempo para implementarlo y el tener un servicio en tiempo y forma, hará que el cliente perciba mayores beneficios que costos.

Al final, es el cliente quien determina el valor del producto, con base en el beneficio que este le da y no en el costo, es importante que nuestra área de servicio sea quien aporte a la cadena de valor y brindemos un servicio integral, este siempre será un diferenciador 

Por lo anterior descrito, es muy importante mantener el negocio al día, no solo con lo que pasa en su interior; sino que es de vital importancia saber qué ocurre en todo el mercado, con nuestros clientes, qué oportunidades y riesgos existen, así como tener siempre presente las propias debilidades y fortalezas para aprovechar el momento.

Es importante que de forma periódica se analice el valor de los clientes con la intención de detectar aquellos a quienes conviene apoyar por el potencial de crecimiento real que representan.

La interacción con los clientes debe ser aquella que maximice la efectividad en la relación comercial. La relación con el cliente está especialmente marcada ya que, sin importar el tema, siempre se deberá enfocar el esfuerzo a un buen servicio al cliente, que generaran oportunidades de negocio futuras.